viernes, 7 de junio de 2013

LA JAULA




Y así los pensamientos zumban y hablan de sus pendientes,
de la ruta a la nueva escuela, de comprar pan y leche,
de ir a la farmacia.
Los pensamientos se multiplican por todo el salón...
_Coloquen sus fichas._
Alguien escucha el tintinar de las monedas.
_¡Quitense!, ¡Atrás!_´
(Los canarios cantan la melodía de las máquinas tragamonedas)
Los pensamientos y la confusión se funden
con el edificio de muros de carne
que se sobresalta con el estallido de las granadas.
Los pensamientos se rompen con el chillar del combustible que
arde.
La razón sucumbe ante los alaridos que el fuego seca,
pajaros de humo buscan su refugio en los pulmones,
las manos de ceniza no logran abrir las puertas de emergencia.
(Al final: canarios negros en el suelo)


Este texto fue sacado del libro un gorro ruso Gabriela d´Arbel